Con frecuencia, las personas evitan situaciones que puedan causar estrés o ansiedad. Lamentablemente, la evasión intensifica la ansiedad porque impide que la persona aprenda que puede superar estas situaciones.
Si has estado evitando cosas, quizás sea momento de comenzar a afrontar tus miedos poco a poco para vencerlos estableciendo objetivos. Con la práctica, mientras sigues afrontando los miedos, reducirás tu ansiedad y desarrollarás confianza.
¿Qué pequeño paso podrías dar hacia tu objetivo? Comienza con desafíos más fáciles y avanza hasta alcanzar tus mayores objetivos. Lo importante es perseverar y no ceder ante tus ganas de salir huyendo de cierta situación. Si te quedas y usas tus habilidades, como la respiración profunda, notarás que con el tiempo tu ansiedad disminuirá.